miércoles, 25 de junio de 2008

El cine y la denuncia al contrabando de diamantes


“A veces me pregunto si dios nos perdona por lo que nos hemos hecho uno al otro, luego miro a mi alrededor y me doy cuenta que dios se fue hace mucho tiempo de aquí”
Danny Archer

La película “Diamantes de sangre”, relata el contrabando de diamantes durante la Guerra Civil de Sierra Leona en 1999, evidenciando la corrupta industria internacional de esta piedra tan valiosa, así como el tráfico de armas.

En ella, un contrabandista de Zimbabwe (Danny Archer) se alía a un pescador nativo de la etnia mende, llamado Solomon Vandy, así como con la reportera inglesa Maddy Bower, para encontrar a Dia Vandy, hijo de Solomon, quien fue secuestrado y reclutado por el Frente Revolucionario Unido (RUF), el cual es un grupo que se enfrenta al gobierno, por su parte, Archer pretende encontrar un diamante rosa que fue escondido por Solomon, y cuyo valor en el mercado internacional es muy elevado.

El gran entramado de la red internacional de tráfico de diamantes se hace evidente cuando Archer le dice a Bower que la principal casa de ventas de los diamantes en el mundo, es la encargada de controlar también el mercado negro a fin de mantener los altos precios de la codiciada joya, así como su exportación por medio de Liberia, país vecino de Sierra Leona.

Finalmente la historia acaba cuando el joven contrabandista muere, no sin antes liberar a Dia Vandy, y reunir a toda la familia de Solomon, entregándoles el diamante rosa, asegurándose que la comunidad internacional centre su atención en ese cruel hecho, tras otorgarle a la reportera Bower la información necesaria para llevar el tema a los paneles internacionales, y a la prensa mundial.

La película muestra también la importante labor que las Naciones Unidas tuvieron, trasladando a los refugiados a Guinea, proporcionando alimentos, y protegiendo a los periodistas.

De igual forma se documenta las acciones que la comunidad internacional tomó en torno al problema, entre ellas se encuentra “ El proceso Kimberly” , que se adoptó en enero de 2003, y que fue firmado por 40 naciones, el cual “fue un esfuerzo por detener el flujo de diamantes en conflicto”.

Conclusión
Lo que para unos es una bendición, para otros es una maldición, ya que si bien, los recursos naturales en ocasiones pueden traer riquezas a las naciones que los poseen, en otras, la gran mayoría, únicamente los hacen víctimas de naciones o empresas ambiciosas, que no hacen más que someter o dañar a sus habitantes. Una frase de la película, que ilustra muy bien esto, es cuando un habitante de una aldea atacada por los rebeldes en Sierra Leona le dice a Solomon Vandy: “¡Espero que no descubran petróleo aquí!”.

Y si bien, la comunidad internacional reaccionó ante este hecho, su labor no fue tan enérgica como debió ser, ya que incluso “El proceso Kimberly” fue firmado en 2003, años después de la masacre en Sierra Leona. También cabe aclarar que México no ha firmado dicho proceso.

Lo que ocurrió en la mayoría de las naciones de África no debe permanecer en el olvido, y debe servir de ejemplo para que situaciones como ésta no ocurran en ningún lugar del mundo.

Finalmente me gustaría decir que la película “Diamantes de sangre” me pareció estupenda, no sólo por la trama, sino por que también servirá para darle difusión a un tema marginado del “colectivo imaginario” de la sociedad internacional.

Filmografía

"Diamantes de sangre"
Titulo original: "The blood diamond"
Año : 2006
País de origen: Estados Unidos
Idioma original: Inglés y Mende
Producida por: Warnes Bros. Pictures
Dirigida por: Edward Zwick
Actores protagónicos:
Leonardo DiCaprio como Danny Archer
Jennifer Connelly como Maddy Bowen
Djimon Hounsou como Solomon Vandy
-----------------------------------
Como citar el artículo: Herrera, Héctor. "El cine y la denuncia al contrabando de diamantes", en "El águila, el jaguar y la serpiente", http://nohoch-balam.blogspot.com/. 25 de junio de 2008.

No hay comentarios: